Cómo hacer torrijas de manzana y canela, un giro frutal y especiado al clásico de Cuaresma

Las torrijas o torrejas no sólo son uno de los postres más clásicos de Cuaresma, también son una gran forma de darle vida a ese pan duro y olvidado en la alacena. Para darle un toque especial a esta preparación, probamos con una receta de torrijas de manzana y canela y tenemos que decir que el resultado fue glo-rio-so.

Una ventaja de este postre es que la mezcla de manzana y canela se puede preparar con antelación, guardar en el refrigerador y utilizar para complementar las torrejas y también otros platillos como avena cocida, helado de vainilla o arroz con leche.

¿Cuál es el mejor pan para hacer torrijas o torrejas?

El mejor pan será el que tenga una miga apretada y densa para que absorba el líquido y todo el sabor. Un pan más ligero no guardará tanto la humedad y, por ende, tendrá menos sabor y una textura menos cremosa y más líquida.

Se puede usar baguette o bolillo del día anterior o, antes de preparar las torrijas, hornear las rebanadas por unos minutos para endurecer el pan y que no se desarme durante la etapa de remojo.

¿Qué manzanas usar para hacer la compota de manzana y canela?

Cualquier tipo de manzana sirve, pero la mejor opción es elegir manzanas verdes que le darán un toqué ácido a la compota que contrastará muy bien con lo dulce de todo el platillo.

Elige manzanas que tengan un color brillante, un aroma a agradable y que se sientan pesadas al taco, esto es un indicador de que son manzanas frescas y serán deliciosas en estas torrijas de manzana y canela.